CHANITO MANDÓ.

F1
Una lastima, una triste guasa, una pena, una broma pesada. Pasaban las vueltas ayer después del pit stop y a uno le costaba asumirlo. Ver a Petrov delante me recordó a Turquia, aquel domingo tampoco pudimos pasarlo. Red Bull ha ganado el campeonato de constructores, el de pilotos y si hubiera uno de estrategias también se lo hubieran llevado. Una vez más, porque no es la primera, Horner dio en la tecla. La parada de Webber puso nervioso al personal de Ferrari, tan nervioso, que en el transcurso de 5 o 6 vueltas no se percataron de que Petrov y Rosberg ya habían parado. Obstinados con los tiempos de Webber, olvidaron lo más importante. Jugada maestra de Red Bull y error de principiante de Ferrari, se intercambiaron los papeles como gran parte de la temporada.
Creí que en Brasil habían perdido el campeonato al no favorecer a Webber y me parecía incomprensible. Pues no, lo ganaron y con Chanito, que volvió a levantar su dedo índice con más fuerza que nunca y en más ocasiones que nunca. Enhorabuena.

FÚTBOL
El partido del Molinón parecía un calco de la carrera. Atascados los 90 minutos detrás de Petrov, sin encontrar un hueco o rendija. Ese parecía el sino del partido hasta que Karim se desmarcó habilmente y remató con veneno, su rechace lo empujó el Pipa al fondo de la red.
El Barca anduvo pícaro. Como sucediera en el Madrid-Barca del año pasado, en el único momento de relax del equipo contrario, cuando el arbitro ha pitado una falta, ponen en marcha toda su maquinaria y a toda velocidad. Resultado: golazo y partido resuelto.