martes, 17 de abril de 2012

SUERTE MAESTRO.


Astifinos. Estos alemanes no han sido afeitados, una cornada puede ser letal. Bravos. No huyen de la capa, no se van a tablas ni dejarán de pelear hasta el último aliento. Encastados. Su condición es producto de su historia, no son nuevos, llevan años dando guerra. Nobles. Por derecho, no esconden, se ven venir de lejos. Serios. Hasta decir basta, ni cuando marcan ríen, se enfadan aun más en las celebraciones. Cuajados. Empiezan a estar en su madurez, ya pasaron sus años mozos.

Hasta ahora el Real ha toreado corridas cómodas, toritos con apenas cuatro años de pitones redondeados y escaso empuje. Mansos casi todos y con poca presencia. Los de hoy no son broma, estos o te ponen un cortijo o te vas con los pies por delante.

2 comentarios:

  1. Para el Madrid lo fundamental será fijarlos con un par de pases de castigo, hacerle una faena trabada, con mucha mano derecha, sin quitarle el trapo de la cara. No ha de caer en el error (aunque el espectáculo lo demande), de situarse en los terrenos del toro, pues las arrancadas podrían ser letales. Es mejor fajarse en pases que lo sometan, toreando muy por bajo una vez que la embestida se temple, pero insistiendo en darle mucha franela y pocos metros.
    Y a la hora de matar no se puede fallar, cualquier extraño del toro puede ser un desgarro letal.

    La supuesta irregularidad de MESUT ÖZIL

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  2. Bueno como va de taurino, mas cornadas da el hambre maestro, suerte y al toro, con un par de huevos o de trivotes, es el primer embiste, siempre quedará el segundo en el corral propio.

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